De todas esas cosas "complicadas" que tiene la vida y por las cuales tenemos que pasar, hay una que me parece muy simpática y es la de la búsqueda de nuestra identidad sexual; digo simpática porque al acordarme de como fue mi experiencia me causa algo de simpatía, pero bueno, de eso hablare en otro momento.
Encontrar nuestra orientación sexual es una de esas decisiones que marca tu vida, independiente de que sea homo o heterosexual eso no hace que tu vida sea mejor o peor, o por lo menos así debería serlo.
Estoy hablando de esto porque considero que nuestra actividad sexual comienza una vez y hallamos encontrado y determinado si nos gusta X o Y género (aunque sé de personas que encuentran su sexualidad al experimentar con ambos géneros), al tener esa conciencia y yendo de la mano con todas nuestras vivencias, es en ese momento cuando empezamos nuestro "Viaje al sexo", un viaje lleno de tropiezos pero que cuando LLEGAMOS nos damos cuenta de lo divertida, sensacional, estimulante, poética, romántica, salvaje, instintiva, exigente, necesaria, relajante y adictiva que es esa experiencia.
Por: Número 19
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