Descripción bar

Bar

Situado en una esquina de una de las tantas avenidas más transitadas de Medellín, desde afuera puedes ver la decoración; la entrada, es pequeña, pero sus paredes son abiertas, solo están cubiertas por arbustos que se enredan en las paredes y en parte del frente del bar  haciendo armonía con el nombre. Cuando entras, sientes un ambiente ameno, las lámparas  ondeadas y de color naranja  proyectan una luz tenue que le da calidez al lugar. En la entrada siempre te reciben con un respetuoso saludo y te acompañan a tu mesa, las cuales por lo general son cuadraras y de dos puestos, dando a entender que es un lugar muy visitado por parejas, diseñado para citas románticas a la luz de las velas.

Es un lugar en donde el buen vino no puede faltar, acompañado por una entrada o pasantes, con  música en vivo de fondo que armoniza el lugar. Uno de los atractivos de este lugar es  el saxofón, instrumento  muy sentimental y romántico que conquista  y llama la atención de cualquier persona que pasa  por la calle.

Las personas que lo frecuentan, tienen características muy similares, proyectan sofisticación, elegancia, inteligencia, pero a la vez dan la impresión de que son sollados, les gusta compartir una noche tranquila  con un buen  vino de compañía y un poco de jazz en las notas del saxofón y la guitarra que armonizan  la conversación.

Dos paralelos un mismo sentir. 

Oh! Soledad, enemiga  de los seres humanos que se sienten desplazados y abandonados por sus ideales, llenos de decepciones amorosas y de fracasos personales. Sentimiento que carcome la seguridad y las ganas de luchar a tal punto que las personas se olvidan  de vivir, se llenan de amargura y dejan de disfrutar cada momento de la vida.

Dentro de esta sociedad, inundada de tecnología, la cual se ha encargado de congelar los sentimientos de las personas, y ahogada en riquezas  superfluas, donde la felicidad  dura un suspiro, se encuentra sumergida Martha, una mujer sola, romántica, sentimental, pero abandonada por el sexo masculino, asfixiada en una depresión y una soledad que se apodera de sus pensamientos. y juan  un hombre exitoso , rumbero, mujeriego, extasiado ya de tanto placer y cansado de vivir siempre igual, de tener los mismos amigos, de salir con el mismo tipo de mujeres, y de gastar su dinero en cosas materiales sin importancia, para impactar a  su círculo social.

Dos personas  situadas en dos lugares muy diferentes de la ciudad, que no tienen contacto ninguno, decidieron salir de sus rutinas e ir a caminar por la ciudad. Por un lado, Martha que iba dejando sus pensamientos en cada paso y llena de sentimientos encontrados, se detiene de repente al escuchar el sonido de un saxofón, y como todas las mujeres, ella también funciona por lo que entra por su oído, se  deja seducir por las notas románticas de este instrumento y se detiene a observar, luego de un rato decide entrar a  y pide una copa de vino. Por  otro lado, juan sale desesperado sin despedirse de sus amigos, con ganas de tomarse una copa. Casualmente  entra al mismo lugar. A Juan  no le interesaba ni el ambiente, ni  la música ni el lugar, solo quería un momento de soledad una copa de vino y un momento para pensar.

Dos personajes cada uno  viviendo su propio dolor,  pero compartiendo un mismo escenario que parecía diseñado para despejar sus mentes,  para que salieran de su rutina, lleno de música, tragos interacción con otros,  que parecía un aliado para que cada uno pudiera luchar con su propio yo. Dos mundos distintos, en un mismo lugar, pero con el mismo sentimiento; buscando refugio en una copa y en su propia soledad, un germen social que  los ciega, que no les permite ver  que  todos  vivimos en un mismo mundo, que por más diferentes que seamos, estamos inmersos en él, no ven que estamos expuestos a vivir la soledad solo si le permitimos a ella que nos contagie, y que somos capaces de salir de ella  si nos lo proponemos,  es aquí  donde aprendemos que  la compañía es elemental para todo ser humano, no solo  para buscar una felicidad individual, sino también complacerse al  hacer sentir feliz a otro.

Keren Durán.