Viaje al Sexo

Amor: ¿tu conoces el sexo?, ¿quieres conocerlo?, esas dos preguntas aterrorizaron a Juana, una mujer joven, inexperta y virgen, quien llevaba cinco meses de relación con Camilo, y hasta ahora él se había comportado como un hombre respetuoso, responsable, amable y cada que podía le demostraba a Juana lo feliz que se sentía siendo su novio. Pero cuando este joven le hizo esas preguntas a su novia, lo único que recibió fueron insultos, cosa que a él realmente le sorprendió, porque sus intenciones no eran para nada morbosas, es más, el solo pensaba en hacer sentir bien a su novia, pero tal vez se equivocó en la manera de preguntarle sobre ese viaje.


Cierto dia, Camilo iba por la calle y se sorprendió al recibir una publicidad que recomendaba conocer un pueblo muy lejano llamado Sexo; Camilo quedo realmente asombrado, pues no se imaginaba que en el mundo existiera un lugar llamado así, pero resulta que en nuestro país se ve de todo, y evidentemente existía un pueblo llamado Sexo. Con los días a Camilo le fue creciendo su curiosidad sobre este lugar, y se acerco a la agencia de viajes que promocionaba unos recorridos turísticos en ese lugar, según la fotografías que le mostraron al joven, Sexo se veía lindo, tranquilo, emocionante, romántico y relajante, fue por ello que accedió a la propuesta de la promotora y compró un paquete turístico para dos personas a ése maravilloso lugar.

El dilema comenzó cuando Camilo pensó en la manera en que le iba a preguntar a Juana si querria acompañarlo a ese increíble lugar, Sexo, pues él sabía que su novia era bastante timida y que tal vez no accedería a pasar un fin de semana a solas con el en dicho lugar, pero lo que Camilo no pensó era que posiblemente ella no sabría de la existencia de Sexo, pues últimamente se estaba hablando mucho de ese lugar, y lo más probable era que ella también lo conociera.

Como conté la principio, Juana quedó realmente desconcertada con la propuesta de su novio, pues ella nunca imagino que él le fuera a proponer que tuvieran sexo de esa manera, ella soñaba con un cuarto lleno de rosas, vino y velas; y su novio, sin saberlo, había acabado con esa ilusión.

Pasaron muchos días, después del momento que Camilo invito a su novia a Sexo, invitación que obviamente ella rechazó, pero él seguía con la ilusión de conocer Sexo con su novia, y resolvió volver donde ella y explicarle todo, pues al final entendió que fue un error de interpretación, porque no supo explicarle detalladamente en qué consistía su invitación, su viaje al Sexo. Finalmente Camilo habló con Juana, y aunque esta pensó bastante en darle el si, finalmente accedió a ir con su novio a Sexo.

Camilo y Juana, se fueron para Sexo, y comprobaron que era un lugar espectacular, con muchas cosas por conocer, y aunque rodeado de mitos por su nombre, era verdaderamente fascinante. Con lugares llenos de misterio, pero que merecían la pena descubrirlos sin nada de tapujos, Sexo era un espacio para encontrarse con su verdadera esencia, para liberarse del estrés, para relajarse, para enamorarse, para liberar emociones.

Sara Gómez López