Ya llevo esperando dos días esa llamada, solo quiero saber si podre hacer ese viaje que tanto quiero o si mas bien busco otra cosa que hacer para este fin de semana, porque después de tanto que he tenido que hacer, ya es merecido cambiar mi vida.
Otro día mas!! Y ¡con la misma rutina!, para el trabajo en la mañana y marcela mi secretaria, ya me tiene todo el día ocupado y siempre que la veo me dan ganas de patearla, porque entro a la oficina y la veo jugando en el computador, tomando tinto, como si no le importara que la estuviera viendo y siempre que me dice las cosas que tengo que hacer para ese dia le da risa por unos segundos y se queda seria de nuevo, solo en algunos casos disfruto la torpeza que tiene cuando se está sirviendo el tinto que se lo echa encima de sus dedos del pie y pasa por mi mente quitarle el computador y ver que hace para defenderse y verla tomando nota al borde del estrés, ¡pero en fin!, mejor salgo del trabajo rápido y abandono el edificio antes de que lo haga realidad mi pensamiento; salgo para la casa y esteban, mi compañero, me deja cerca de alguna estación, para comprar el tiquete y subir al metro, estando en camino para la casa, solo veo a la gente en kioscos y bares bailando, en bares tomando cerveza y disfrutando la vida y yo pensando!! Definitivamente hay que trabajar como negro para vivir como blanco “como vulgarmente se dice”.
Al llegar a la casa, descargo todo, como algo y me siento a organizar mi fin de semana, porque tiene que ser especial y tiene que salir perfecto porque por fin dejare de ser soltero. Unos buenos anillos en diamante y con una buena semana le pediré a teresa, que sea mi esposa, y dejara de ser un secreto para la familia. Aunque no falta!! Que de la facultad mande un correo el doctor Josue diciendo que tenesmo trabajo que hacer, porque se le olvido sacar una nota, me retrase el viaje y me cague el fin de semana.
POR: Juan Sebastián Velásquez zapata
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